La impaciencia de un niño

?La impaciencia de un niño.

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Disfruta con la fábula «La impaciencia de un niño«, una historia aleccionadora que te puede ayudar en tu vida. Si sigues leyendo está fábula encontraras, tal vez, una solución a lo que estás buscando.

¿Te has preguntado alguna vez cuando lees una fábula, leyenda o cuento en que te puede ayudar en tu vida?. Si dudas sigue leyendo está fábula encontraras, tal vez, una solución a lo que estás buscando.

No importa la edad que tengas; una fábula como una parábola te marca un camino que puedes seguir.

Desde BelenCribs queremos ayudarte y para ello te hemos preparado varias fábulas para entretenerte y colaborar contigo en la educación de tus hijos o alumnos. Junto con las fábulas, también, te traemos ejercicios de comprensión lectora y otras actividades que puedes realizarlas con los niños.

? La impaciencia de un niño

Había una vez un profesor que en una de las clases entregó semillas de girasol a sus alumnos para que plantaran y cuidaran en el huerto escolar.

Uno de los niños, a quien encantaban las pipas de girasol, estaba tan emocionado que plantó la semilla y la cuidó con esmero durante días.

Cuando por fin apareció el primer brote, el niño impaciente fue a ver a su profesor «¿puedo arrancarla ya?», le preguntó ansioso.

El maestro contestó que aún debía cuidar la planta por mucho tiempo antes de poder recoger un buen montón de pipas de un solo girasol.

El niño volvió decepcionado, pero siguió cuidando su planta. Pero cada vez estaba más impaciente, y no hacía más que preguntar al profesor cuándo podía cortar el girasol.

El profesor le dijo: debes tener paciencia las plantas y nuestras acciones necesitan paciencia. Pero el niño cuando vio las primeras pipas en la flor, fue a cortarla.

El girasol le habló: no me cortes todavía estoy verde y no me podrás comerme. A pesar de las advertencias el niño no le hizo caso y lo cortó para comerlas.

Como la planta estaba aún verde, las pipas no se podían comer. El niño quedó desolado: ¡tanto esfuerzo cuidando su planta para al final echarlo todo a perder por un poco de impaciencia!

Y aún fue mayor su enfado cuando comprobó lo enormes que llegaron a ser los girasoles de sus compañeros, así que se propuso firmemente no volver a ser tan impaciente y hacer caso al profesor y a sus padres.

Sus compañeros al verlo triste por su torpeza le dijeron no te preocupes nosotros te daremos de nuestras pipas.

El niño aprendió que la impaciencia entorpece el pensamiento y lo transforma en impulso. Por el contrario la paciencia es inteligencia y armonía del espíritu.

?El vídeo de la impaciencia de un niño

Moraleja «la paciencia es la madre de la ciencia»

?Comprensión lectora

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Maestro en clase, por Belencribs

La impaciencia de un niño

¡Ponte a prueba y responde a este trivia y descubre cuanto has comprendido sobre esta fábula!

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¿Qué hicieron sus compañeros?

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¿Que le dijo el profesor al niño impaciente?

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¿Qué le dijo el girasol?

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¿De que eran las semillas que entregó el profesor?

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¿Cómo quedó el niño?

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¿Qué hizo el niño?

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1.- ¿De que eran las semillas que entregó el profesor?

A.- De avena

B.- de maíz

C.- De girasol

2.- ¿ Que le dijo el profesor al niño impaciente?

A.- Tener que regarla

B.- Que le echara abono

C.- que tuviera paciencia

3.- ¿Qué hizo el niño?

A.- Regó la planta

B.- Cortó la planta

C.- Limpió la planta

4.- ¿Cómo quedó el niño?

A.- Triste

B.- Alegre

C.- Desolado

5.- ¿Qué le dijo el girasol?

A.- Se buen chico

B.- No me cortes

C.- No te precipites

6.- ¿Qué hicieron sus compañeros?

A.- Se rieron de él

B.- No les importaba

C.- Le dieron pipas

Test de ortografía La impaciencia de un niño

1. semi_as

 
 

2. reco_er

 
 

3. _erde

 
 

4. i_pulso

 
 

5. inteli_encia

 
 

☑️Actividades

⌛1.- Adivina adivinanza:

Tengo ocho patas cargadas de ventosas y paseo por las rocas meciéndome en las olas. ¿Quién soy?

2.- Acertijo:

Alas de mil colores y se pierden entre las flores.

Si no sabes las respuestas las tienes al final de página

?¿Cuál es la moraleja de la fábula de la impaciencia de un niño?

El refranero de la lengua castellana, es muy prolijo en elogios a la paciencia.

Aparte de ser una virtud podíamos decir que «la paciencia es la madre de todas la virtudes».

Colección especial de fábulas y cuentos infantiles
En BelenCribs encontrarás muchas fábulas, cuentos infantiles e historias dedicadas a los niños y a su formación en valores. Entra en las secciones y visita el cuento que más te guste. Tambien podrás realizar las actividades que te hemos preparado:

?¿Cómo te puede ayudar la moraleja de la fábula de la impaciencia de un niño?

Cuando perdemos la paciencia las cosas marchan peor como le ocurrió al chico del cuento.

Muchas veces debido al cansancio del día a día, al estrés y todo lo que nos rodea hace que muchas veces perdamos la calma y nos revelemos.

Si somos padres o educadores hemos de tener en cuenta varias premisas para no perder la paciencia debido a los pequeños.

?Reflexiones sobre la moraleja de la fábula de la impaciencia de un niño.

Aquí te dejo unos puntos que te pueden servir:

Primero.- Los niños hacen cosas de niños. No son personas adultas y, por tanto, hacen cosas de su edad

Los niños la mayoría de veces no obedecen a la primera, quieren tocarlo todo, cuestionan la autoridad de los padres, querer jugar sin parar ni para comer o dormir, o decidir qué abrigo ponerse aunque sea verano etc.

Segundo.- Su necesidades son diferentes a la de los adultos. Mientras yo necesito descansar de un día agotador, mi hijo necesita la atención de su madre y padre: ya sea jugando o preguntando.

Tercero. Generalmente no tienen prisa ni en comer, ni en vestirse, ni en caminar, ni para llegar a ningún sitio, ni en crecer.

Cuarto.- No es cosa de niños hacer las cosas bien. Sí es cosa de los padres exigirles que las hagan bien.

Quinto.- Los hijos necesitan dedicación de los padres con paciencia.

Sexto.- Entregarnos. Nosotros necesitamos también a nuestros hijos. Abrir nuestro corazón, jugar, cantar, danzar sin por ello perder nuestra parte de adulto responsable que se vuelve más flexible, amoroso y sin exigencias.

 

Repuesta a la adivinanza: El pulpo

Respuesta al acertijo: Las mariposas

La impaciencia de un niño

 

 

 

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