Disfruta con la fábula de la abejita Lunita, una historia aleccionadora que te puede ayudar en tu vida. Si sigues leyendo está fábula encontraras, tal vez, una solución a lo que estás buscando
¿Te has preguntado alguna vez cuando lees una fábula en que te puede ayudar en tu vida?. Si dudas sigue leyendo está fábula encontraras, tal vez, una solución a lo que estás buscando.
No importa la edad que tengas; una fábula como una parábola te marca un camino que puedes seguir.
Desde BelenCribs queremos ayudarte y para ello te hemos preparado varias fábulas para entretenerte y colaborar contigo en la educación de tus hijos o alumnos. Junto con las fábulas, también, te traemos ejercicios de comprensión lectora y otras actividades que puedes realizarlas con los niños.
La abejita Lunita
Se llamaba así porque tenía cara de luna. Siempre estaba sonriendo y alegre.
Era muy trabajadora. Por los campos floridos ella volaba, subía y bajaba viendo las flores que más le gustaba.
Ella chupaba el néctar de las flores y lo convertía en rica miel. Con sus compañeras salían a buscar el alimento que le daban las flores.
Cuando se posaba en ellas, con sus patas recogían el polen y así polinizaba otras flores para que dieran sabrosos frutos.
Ella vivía en una hermosa colmena junto con muchas otras abejas. Sus casas eran unas celdas donde vivía felices y cuidaban a sus hijitos.
Todos los días, Lunita, salía al campo para ver las flores. Había flores de muchos colores y olores.
Había flores rojas, flores amarillas, flores blancas. En primavera, los campos se vestían de muchos colores, eran como un enorme arco iris con sus variados colores.
En la colmena Lunita junto con sus compañeras fabricaban blanca cera para las velas y rica miel de distintos sabores.
Cuando Lunita volaba por los campos, junto con sus compañeras, se divertía subiendo y bajando yendo y viniendo sin parar, dando vueltas y más vueltas para en las flores reposar.
Cuando salgas al campo y veas una abeja sobre las flores posar, respétala y como premio rica miel tendrás.
El vídeo de la abejita Lunita
Moraleja: Respeta a todos los seres para que te respeten
Comprensión lectora
1.- ¿Por que se llamaba Lunita la abeja?
A.- porque era como la luna
B.- Porque tenía cara de luna
C.- Porque ojos de luna
2.- ¿Qué hacia todos los días Lunita?
A.- Salia a dar una vuelta
B.- Salia a dar un paseo
C.- Salía a ver las flores
3.- ¿Cómo se vestían los campos en primavera?
A.- Se vestían de Rosa
B.- Se vestían de muchos colores
C.- Se vestían de blanco
4.-En la colmena ¿Qué fabricaban las abejas?
A.- Cera
B.- Polen
C.- Agua
5.- ¿Cómo era la miel que fabricaban?
A.- De romero
B.-De azahar
C.-De distintos sabores
6.- Si ves una abeja ¿Qué tienes que hacer?
A.- Espantarla
B.- Respetarla
C.- Cuidarla
Test de ortografía
☑️Actividades
⌛Adivina adivinanza
Agua pasa por mi casa, cate por mi corazón. El que no lo adivinara, será un tontorrón.
❓Acertijo
En Granada hay un convento y más de mil monjas dentro con hábito colorado; cien me como de un bocado.
Si no sabes las respuestas las tienes al final de página
¿Cuál es la moraleja de la fábula de la abejita Lunita?
La moraleja que encontramos en la abejita Lunita es que hemos de respetar a todos si queremos que nos respeten a nosotros.
El respeto es un componente muy importante tanto de la identidad personal como de las relaciones interpersonales.
Sentirse respetado podría considerarse un derecho humano básico.
La falta de respeto es algo muy importante que puede traer consigo rupturas de relaciones e incluso violencia.
¿Cómo te puede ayudar la moraleja de la fábula de la abejita Lunita?
El respeto es un concepto que hace referencia a la capacidad de valorar y honrar a otra persona, tanto sus palabras como sus acciones, aunque no aprobemos ni compartamos todo lo que haga.
Respetar a otra persona es no juzgarla por sus actitudes, conductas o pensamientos.
Por tanto, respetar a los otros es ser capaz de comprender y aceptar que existen esas diferencias individuales, pero, sobre todo, entender que como miembros de una sociedad somos iguales.
Respetar la Naturaleza no significa tan solo respetar el entorno en el que vivimos, conservar un paisaje de especial belleza o salvar de la extinción de alguna especie animal.
A la larga, el respeto por la naturaleza nos lleva a cambiar nuestra forma de vivir y nuestra actitud respecto del mundo y de nosotros mismos.
Reflexiones sobre la moraleja de la fábula de la abejita Lunita.
A todas las personas se les debe respeto por el simple hecho de ser personas.
Por eso es muy importante enseñar a los niños desde pequeños el valor del respeto mutuo. La mejor forma de enseñar a respetar es convertirnos en el modelo de nuestros hijos.
Es muy importante, comenzar el respeto por uno mismo, puesto que valorarás a los demás en la medida que seas capaz valorarte a ti mismo.
«no hagas lo que no quieres que te hagan», y «respeta y valora»
Algunos sinónimos de respeto serían: consideración, deferencia, obediencia, atención, cortesía, tolerancia, acatamiento o admiración.
Repuesta a la adivinanza: El aguacate
Respuesta al acertijo: La granada
Las abejas
Antes de nada, diremos que son las abejas. Son unos insectos de color parduzco oscuro, que tienen dos pares de alas transparentes que miden unos 15 milímetros, que viven en colonias en los huecos de los árboles o en colmenas que las personas las preparan.
Cada colmena tiene una sola hembra fecunda llamada reina, diversos machos llamados zánganos y numerosísimas hembras estériles llamadas obreras y que son las que fabrican la cera, el polen y la miel.
Los enjambres tienen una estricta organización jerárquica de tres rangos sociales: la abeja reina, los zánganos y las abejas obreras
Las abejas son uno de los insectos más antiguos que puebla nuestro planeta. Aproximadamente treinta millones de años. Viven una media de cinco años.
Su impacto ambiental
Son insectos polinizadores por excelencia. Por esto tienen una función esencial para el equilibrio de la naturaleza.
Si no fuera por las abejas muchas plantas no se reproducirían. Son ellas las encargadas de llevar el polen de flor en flor o planta a planta en sus patas y pelos del cuerpo cuando se posan en las flores para chupar el néctar.
Como consecuencia de trasladar el polen desde el órgano masculino de las flores (conocido como la antera) hasta el órgano femenino (es decir, el estigma). Fenómeno que se conoce con el nombre de fecundación.
Se reproducen a través de huevos, los cuales se depositan en compartimentos llamados alvéolos. La reina es la única que tiene capacidad reproductiva.
Las larvas que se convertirán en las reinas de la colmena, por otro lado, son alimentadas con jalea real; el resto de las abejas ingieren papilla hecha con polen y miel.
Las abejas al libar el néctar de las flores lo mezclan con una enzima que lleva su saliva y lo deposita en los panales. Allí se transforma en miel.
Una vez convertida en miel el apicultor la corta para purificarla y se pueda comercializar.
Curiosidades
Antes de finalizar este artículo mostramos algunas curiosidades sobre la organización dentro de una colmena.
Abeja reina
Como dijimos anteriormente la abeja reina es la única hembra fértil que pone los huevos fecundados que dan origen a las abejas obreras que son infértiles.
En cada camada puede haber varias larvas que podrían convertirse en reina, pero solo una lo conseguirá. Por orden dinástico la primera abeja real que nace. Una vez que nace su objetivo es eliminar al resto de posibles candidatas. Si nacen dos al mismo tiempo lucharan a muerte entre ellas y la que salga victoriosa será la reina. A los seis días la nueva reina emprenderá un único vuelo nupcial, en el que será fecundada por unos cien zánganos y después regresará a la colmena.
A partir de ese momento su tarea será poner huevos hasta que muera que será unos cuatro o cinco años después.
La reina abeja comienza a desovar en primavera que es la estación que mas flores hay y facilita a las obreras su trabajo.
Abeja obrera
Las abejas obreras viven aproximadamente 45 días y como dice su nombre son las que hacen todo el trabajo de la organización de la colmena. Como el tiempo de vida es corto la responsabilidad de estas obreras va cambiando. Los primeros cuatro días se encargan de limpiar la colmena y los alvéolos. Hasta el día once hacen de nodriza y alimentan las larvas reales. Los siguientes tres días debe almacenar el polen y el néctar, ventilar, mantener la humedad y temperatura de la colmena agitando las alas.
Desde el día dieciocho hasta el veintiuno actúa de centinela de la colmena. El resto de los días que le quedan lo emplean en recolectar polen y néctar y traer alimento para el resto de la colonia.
Así mismo la abeja reina pone huevos no fecundados que generan los zánganos que son fértiles así mismo son gordos y peludos. Son incapaces de alimentarse por ellos mismos; son las obreras las que los alimentan.
Zángano
El trabajo del zángano solo es fecundar a la reina y una vez ha terminado es la propia reina quien los mata. Si alguno logra escapar e intenta regresar a la colmena las obreras guardianas se lo impiden por considerarlos inútiles.
Como te decíamos en el cuento: si ves una abeja respétala es un insecto de gran valor ecológico.